Comer carne aumenta tus probabilidades de morir y padecer cáncer
A muchos de nosotros nos encanta la carne, ya sea de algún mamífero, un ave o de un pescado. Seguramente a algunos de ustedes no, pero en el mundo en el que vivimos existe todo una industria y cultura detrás del consumo de ella. Parte del problema es que no sabemos hasta qué punto nos afecta una alta ingesta de proteína animal pero, de acuerdo con un estudio realizado por Valter Longo y Edna Jone, de la Universidad del Sur de California, el ser adulto y tener un alto consumo de carne te hace el doble de propenso a morir y te eleva hasta 4 veces de que sea por cáncer, en comparación con gente cuyo consumo es muy bajo. “Uff, lo bueno es que sustituyo mi consumo con quesos”: Si es el caso, temo decir que el estudio también los incluye. Previo a este estudio no existía evidencia definitiva de esta relación.
La investigación publicada a principios de marzo en la revista Cell Metabolism sentencia que aquellas personas que consumen proteína animal son 74% más propensos a morir de lo que sea, que aquellos que su consumo es bajo.
Los investigadores mencionan que parte del problema es tener la percepción de que la adultez es una fase monolítica de la vida, sin considerar cambios biológicos mientras envejecemos y saber que las decisiones que tomemos hoy tendrán consecuencias en nuestro futuro. Por lo que en el estudio añaden que al cumplir +65 años de edad, el cuerpo requiere de una ingesta proteínica mayor de manera que el cuerpo evada la pérdida de masa muscular.
Los causa, de acuerdo al artículo, se deben a la producción de la hormona IGF-I, encargada de ayudar a nuestro crecimiento, además de estar ligada a la susceptibilidad del cáncer. La regulación de la hormona está dada por el consumo de proteína y entre más se incremente su producción, la susceptibilidad de muerte aumenta (por cada 10ng/ml de IGF-I, la probabilidad de morir por parte de gente con ingesta alta aumenta 9%).
Ahora seguramente la duda es que tanto es mucho y que tanto es poco. Por ello, los autores recomiendan lo que otra agencias de salud recomiendan: consumir 0.8 gramos de proteína diarios por cada kilogramo que peses, aclarando que esto sea durante la adultez. Además, el estudio indica que lo mejor sería consumir proteínas provenientes de fuentes vegetales, como las leguminas, pues sus efectos en la mortandad no son iguales a los que producen las proteínas de origen animal. En cuanto a saber si estas dentro del intervalo de personas que tiene un consumo alto, la publicación indica que esto es cuando las personas obtienen un 20% de sus calorías de la ingesta de proteínas (incluyendo las vegetales). Por otra parte, alguien con consumo moderado se indica que obtiene entre el 10 al 19% de sus calorías de las proteínas y aún tendrían tres veces más riesgo de morir por cáncer que una persona con bajo consumo.
“Casi todos van a tener cáncer celular o pre-cancer celular en algún punto. La pregunta es: ¿Progresará?”, comenta Valter Longo. “Resulta que uno de los principales factores determinantes es el consumo de proteína”.
BONUS: Los resultados del trabajo se compararon con el riesgo de morir por el consumo de tabaco y se observó que se tiene el mismo riesgo.
Es una lástima que Red Barclay, miembro del salón de la fama del restaurante “El matadero”, no supiera de esto antes de que Homero lo retara (T10E17 de los Simpsons).
Fuente en University of Southern California.
Artículo en Cell Metabolism.
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