Cambiar lo suficiente como para ser una planta sin…

Cambiar lo suficiente como para ser una planta sin cloroplastos

En el país de las maravillas, Alicia se encuentra a la oruga y, muy confundida, le dice que “sabía quién era cuando me desperté esta mañana, pero creo que he cambiado varias veces desde entonces”. ¿Se podrá cambiar lo suficiente como para dejar de ser uno mismo? Los que conformamos Historias Cienciacionales no estamos muy seguros de cuántos organismos en la historia de la vida en la Tierra se han hecho esta pregunta filosófica, pero tenemos la ligera sospecha de que esta planta sí se la ha hecho.

Les presentamos a la flor cadáver, conocida en los libros de botánica como Rafflesia lagascae, la cual carece de una característica distintiva de las plantas: los cloroplastos. Estos organelos le dan a las plantas su color verde, convierten la luz del Sol en azúcares, y llevan a cabo una gran variedad de procesos químicos claves. Incluso, tienen su propio material genético, un rasgo que ha servido de argumento para la endosimbiosis (asociación entre dos organismos en el que uno habita dentro el otro).

La planta, que recibe su nombre común del fuerte olor que despide, pertenece a una agrupación de plantas que son parásitas de otras y que han perdido la habilidad para realizar fotosíntesis. Al hacer la secuenciación de su material genético para buscar rastros del de los cloroplastos, veremos que la planta lo ha perdido todo.

Los restos de genes de cloroplasto que tiene la flor cadáver provienen de aquellas que han servido de hospederas. Esto significa que el grupo al que pertenecen la flor cadáver es el primero que se observa que carece de material genético de cloroplastos. De presentarlo, está oculto y a niveles muy bajos.

Los expertos en el tema sugieren que una vez que los cloroplastos perdieron su actividad principal -realizar la fotosíntesis- los genes se desintegraron gradualmente o se movieron, ya sea al genoma principal o al de la mitocondria, otro organelo. Así, el genoma de los cloroplastos fue innecesario.

Cabe mencionar que el color verde y los cloroplastos no es lo que hace a una planta lo que es. Pero así como Alicia ha cambiado mucho desde que amaneció, nuestra flor cadáver ha cambiado lo suficiente como para perder una característica fundamental de las plantas. ¿Cuánto necesitará cambiar para dejar de ser una planta?

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Fuentes:

Artículo original del trabajo donde se analizó el material genético de la Rafflesia lagascae.

Nota fuente de Science.

Imagen tomada de este sitio.

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